La economía y el hogar – Por José Toledo Ordóñez – 10 sep 97
Columna Cimientos – Redactado para páginas editoriales de Prensa Libre
Las sociedades humanas tienen necesidades cada día más grandes y recursos cada vez más limitados para satisfacerlas. La necesidad de repartir estos bienes entre los hombres provoca tensiones. Las personas se comportan de formas diferentes ante esta situación. Así nacen los sistemas económicos -muchos de ellos diametralmente opuestos- y la economía misma. Podemos decir que fundamentalmente “….la economía es el estudio de la escasez y los problemas que de ello se derivan” (Stonier y Hague).
La gente común practica la economía todos los días y sin saberlo utilizan principios económicos al tomar decisiones: al casarse, al divorciarse, al escoger su carrera, al planear la comida del día, al transportarse, etc. El que se enferma evalúa las consecuencias de no ir a trabajar con las molestias de la enfermedad; su decisión tiene un ingrediente económico fuerte; un secuestrador no es la excepción; evalúa los posibles beneficios económicos que obtendrá contra el riesgo de ser capturado. Enseñar esto al mundo le valió a Gary Becker el premio Nobel de Economía en 1992.
El ama de casa es la economista por excelencia. Se las ingenia todos los días
para distribuir los recursos cada vez más difíciles de conseguir (el gasto que le da su marido) entre las necesidades crecientes de la familia. Pero como de todo hay en la vida muchas personas también toman a diario decisiones económicas equivocadas. Veamos algunos ejemplos.
Supongamos que usted tiene un auto pequeño con motor de 1.6 litros que consume un galón cada 40 kilómetros y cada galón le cuesta Q10; el costo por kilómetro será de 25 centavos. Pero el carro no solamente consume gasolina. Tendrá que pagar servicios de mantenimiento, reparaciones, llantas y seguro; consideremos además el costo de la inversión prorrateado en 4 años y los intereses de la misma. Asumiendo que recorre 24,000 kms. al año el costo por kilómetro recorrido andará alrededor de Q2.00. El costo del capital hará subir esta cifra si usted recorre menos kilómetros al año y bajar si recorre más. En este cálculo no estoy considerando la cantidad que recuperará al vender el vehículo después de cuatro años, que puede ser entre 35% y 40% del valor original.
Qué le parecería darle jalón todos los días al trabajo a un cuate que le paga la mitad de la gasolina y con eso ya se cree dueño de la mitad de su carro. El bus del colegio dejó a su hijo y tiene que irlo a dejar; el colegio queda a 14 kilómetros; ida y vuelta gastará Q56. Un ama de casa que vive en la zona 9 escucha que el cartón de huevos está Q3 más barato en un depósito en la zona 1; maneja 10 kilómetros de ida y vuelta; gastó en vehículo Q20 y en total perdió Q17. Ante un argumento semejante una amiga me contestó: “Yo no tomo en cuenta el costo del vehículo porque lo paga mi marido.” Sin comentarios.
Usted vive en la zona 15 a 4 kilómetros de su trabajo; llega en 15 minutos. Le ofrecen un empleo donde gana Q500 más en la zona 11 a 14 kilómetros de su casa a donde llega en 1 hora. Gastará Q20 adicionales por viaje. Haga números dependiendo del número de viajes y póngale valor a su tiempo.
Su esposa se va una semana de compras a Miami porque allí todo cuesta la mitad. Se gasta $600 en el pasaje, $240 en alquiler de carro, $630 en hotel y $300 en comida; en total gasta $1,500 ($214 diarios). Si hace compras por $3,000 saldrá tablas; si las hace por $2,000 perderá $500; esto sin contar el tiempo invertido. Usted aprovecha y le pide un repuesto para su carro ya que en Guatemala cuesta el doble. Ella no lo encuentra en el primer lugar a donde va; en total emplea un día en conseguirlo; el repuesto le costó $200 y el día en Miami $214, sin contar su tiempo. Le deseamos que le hayan dado la pieza correcta. Ya puede usted imaginarse cuánto le cuesta cada encarguito que le hacen sus amigos cuando viaja. Esperamos haber contribuido a que en el futuro tome conciencia de que usted todos los días toma decisiones económicas y a que las haga correctamente.