Del Caos Deviene el Orden
Con mis esculturas pretendo poner un grano de arena en esa batalla de formas en constante cambio y frágil estabilidad: El Universo visto en el transcurso del tiempo, la dualidad orden y caos. ¿Es esta una señal de que la energía del Universo tiende al equilibrio dando lugar al caos? O bien el caos, lejos de ser lo opuesto al orden, lo precede. ¿Conducen las revoluciones a la institucionalidad? De allí el título de esta obra: Del Caos Deviene el Orden.
La pinté de amarillo porque es el color más contradictorio en cuanto a los sentimientos que despierta: alegría, entusiasmo, valor, fuerza, pasión. Color del sol y de la luz. Violento, intenso, agudo, irritante. Señal de peligro.
Kandinsky decía que el amarillo representa la locura violenta, lo insoportable. Fue el color predilecto de Van Gogh, especialmente en los últimos años de su crisis, cuando pintaba paisajes de trigales bajo cielos tempestuosos y amenazantes. Para Frida Kahlo significaba locura, enfermedad, miedo, parte del sol y de la alegría. Para nosotros, hoy y siempre, representa el indomable espíritu revolucionario universitario.